Nunca suavice el evangelio, si la verdad ofende, entonces deje que ofenda. La gente ha estado viviendo toda su vida ofendiendo a Dios; deje que se ofendan por un momento.

Nunca suavice el evangelio, si la verdad ofende, entonces deje que ofenda. La gente ha estado viviendo toda su vida ofendiendo a Dios; deje que se ofendan por un momento.
No somos mandados para hacer diplomacia sino como profetas, y nuestro mensaje, no es otra cosa que un ultimatum.
Un perro ladra cuando su amo es atacado. Yo sería un cobarde si es atacada la verdad de Dios y permanezco en silencio.
El evangelio no es salvación para todos, sino salvación para los que creen. Para los demás es una sentencia de muerte.
¡Muchos se visten, caminan y actúan como si estuvieran poseídos por demonios! Son como pornografía caminando, tentando a tus ojos.
El interés de la Verdad es no abandonarla aunque nos cueste el sacrificio de nuestras vidas, pues nosotros vivimos, no para esta edad ni para los príncipes de este mundo, sino para el Señor.