El gozo de la disciplina
La disciplina debe traernos gozo porque no hemos sido abandonados a la deriva, porque la disciplina viene de aquel quien es “el autor y consumador de nuestra fe” (Hebreos 12.2).
La disciplina debe traernos gozo porque no hemos sido abandonados a la deriva, porque la disciplina viene de aquel quien es “el autor y consumador de nuestra fe” (Hebreos 12.2).