Por Juan Callejas
El fin de semana tuve la oportunidad de ir a ver Joker, la película del momento que relata la “historia de origen” del famoso villano de Batman, pero esta vez contada desde la óptica del personaje y alejada del mundo de ciencia ficción y efectos especiales que rodea la historia.
La película es fuerte, impactante, desgarradora, perturbadora y muy, muy humana…demasiado humana quizás para una audiencia acostumbrada a películas que resuelven el argumento o que nos dejan enganchados para lo que siga…en el caso de Joker, quizás la sensación que queda es que no queremos que siga.
Joker es la historia del espiral descendiente de Arthur Fleck, un hombre con serios problemas mentales que vive dentro de una Ciudad Gótica presentada como una ciudad hundida y hasta embarrada de corrupción, inseguridad, violencia y creciente odio entre distintos grupos de personas.
La película abre con la terrible situación de la suciedad de Ciudad Gótica y las plagas de ratas que “está afectando aún hasta a los ricos”. Vemos una ciudad al borde del colapso, a un empresario millonario -Thomas Wayne, padre de Bruce Wayne (quien en la narrativa que conocemos, se convertiría en Batman)- que se presenta ante la ciudad como el único salvador de la misma y a Murray Franklin, el presentador de televisión que, a mi criterio, representa la cultura de entretenimiento que busca -aunque fracasa- adormecer a Ciudad Gótica a través de la televisión.
La tragicomedia de Arthur Fleck, que lo lleva a convertirse en Joker es un espiral descendiente de varios factores:
- Una crianza desafortunada y en pobreza
- Enfermedad mental
- Ciudad Gótica como lugar donde creció, vive y trabaja
Vemos progresivamente como Fleck se va quebrando hasta que se transforma y se presenta ante Ciudad Gótica como el héroe que las masas buscan…alguien que -sin querer quizás- está lo suficientemente loco como para hacer frente “al sistema” y da rienda suelta a su frustración, ira y furia a través de al menos 4 asesinatos que representan lo que la sociedad percibe como sus fuentes de opresión: los ricos y los medios de comunicación.
En Joker no hay redención, no hay héroe, no hay epifanía que mueva a la acción justa. Lo que me quedó a mi luego de la película fue una perfecta ilustración del espiral descendiente de la humanidad cuando la ira pasiva de Dios es soltada sobre un pueblo que elige abandonarse a hacer lo que quiera, sin consideración por el otro y por las consecuencias de sus acciones:
18Pero Dios muestra su ira desde el cielo contra todos los que son pecadores y perversos, que detienen la verdad con su perversión.
19Ellos conocen la verdad acerca de Dios, porque él se la ha hecho evidente.
20 Pues, desde la creación del mundo, todos han visto los cielos y la tierra. Por medio de todo lo que Dios hizo, ellos pueden ver a simple vista las cualidades invisibles de Dios: su poder eterno y su naturaleza divina. Así que no tienen ninguna excusa para no conocer a Dios.
21Es cierto, ellos conocieron a Dios pero no quisieron adorarlo como Dios ni darle gracias. En cambio, comenzaron a inventar ideas necias sobre Dios. Como resultado, la mente les quedó en oscuridad y confusión.
22 Afirmaban ser sabios pero se convirtieron en completos necios.
23Y, en lugar de adorar al Dios inmortal y glorioso, rindieron culto a ídolos que ellos mismos se hicieron con forma de simples mortales, de aves, de animales de cuatro patas y de reptiles.
24Entonces Dios los abandonó para que hicieran todas las cosas vergonzosas que deseaban en su corazón. Como resultado, usaron sus cuerpos para hacerse cosas viles y degradantes entre sí.
25Cambiaron la verdad acerca de Dios por una mentira. Y así rindieron culto y sirvieron a las cosas que Dios creó pero no al Creador mismo, ¡quien es digno de eterna alabanza! Amén.
26Por esa razón, Dios los abandonó a sus pasiones vergonzosas. Aun las mujeres se rebelaron contra la forma natural de tener relaciones sexuales y, en cambio, dieron rienda suelta al sexo unas con otras.
27Los hombres, por su parte, en lugar de tener relaciones sexuales normales, con la mujer, ardieron en pasiones unos con otros. Los hombres hicieron cosas vergonzosas con otros hombres y, como consecuencia de ese pecado, sufrieron dentro de sí el castigo que merecían.
28Por pensar que era una tontería reconocer a Dios, él los abandonó a sus tontos razonamientos y dejó que hicieran cosas que jamás deberían hacerse.
29Se llenaron de toda clase de perversiones, pecados, avaricia, odio, envidia, homicidios, peleas, engaños, conductas maliciosas y chismes.
30Son traidores, insolentes, arrogantes, fanfarrones y gente que odia a Dios. Inventan nuevas formas de pecar y desobedecen a sus padres.
31No quieren entrar en razón, no cumplen lo que prometen, son crueles y no tienen compasión.
32Saben bien que la justicia de Dios exige que los que hacen esas cosas merecen morir; pero ellos igual las hacen. Peor aún, incitan a otros a que también las hagan. (Romanos 1:18-32)
Joker es eso, una oda a la desesperanza, a la cultura en la que vivimos hoy…polarizada, paranoica por el miedo a todo -a la comida, a quien piensa distinto, al medio ambiente, a que nazcan más personas, a los políticos…a todo-. Joker no ofrece redención y el final de la película nos deja sin palabras porque nos deja sin esperanza. No hay lugar para un héroe y no hay marcha atrás a la debacle.
Joker es difícil de ver porque desafía a una sociedad que se ha negado a ver su propia maldad y corrupción, y siempre ha buscado, como lo hizo Arthur Fleck, a culpables externos.
Joker es una película importante porque se atreve a seguir la trayectoria hermenéutica de las micro-narrativas individualistas, privadas y egoístas del postmodernismo a su última consecuencia…la locura, la soledad, el odio, la venganza, la violencia y la incapacidad de encontrar, aún en el peor de los entornos, circunstancias y vidas, un rayo de esperanza.
Excelente reflexión y la comparación con la escritura de Romanos 1, la descripción encaja perfectamente con nuestro momento actual, DIOS NOS UTILICE PARA SER LUZ Y SAL DE ESTE TIEMPO. GRACIAS
Interesante reflexión, no he visto la película pero si a muchos en su perfil con esa imagen como si de alguna manera los representara…leí también con la esperanza que el post guíe al lector a que sí hay una esperanza en medio de un mundo sin esperanza nuestro Salvador Jesús (pensé que sería bueno compartirlo) .pero no encontré esa parte… Bendiciones!
No he visto Joker y tampoco pienso verlo, pero me ha gustado la forma en la que has dirigido el post.
Me sentí identificada con la última parte del post “a la cultura en la que vivimos hoy…polarizada, paranoica por el miedo a todo -a la comida, a quien piensa distinto, al medio ambiente, a que nazcan más personas, a los políticos…a todo-”
Cuando uno vive sin esperanza, y al ser bombardeado por los medios, nos arrastran por esa corriente del miedo. Por lo menos en mi caso, le tenía miedo al cambio climático, qué va a ser de nosotros sin agua con temperaturas tan extremas, miedo a la sobrepoblación, que no nos demos abasto con los alimentos, que aumente la contaminación debido a eso, miedo a las comida contaminada de pesticidas, etc.
Ahora entiendo un poco porque de todo eso, si miramos todo el panorama general, se acomoda bien para que apoyemos campañas contra el cambio climático, aborto, control de natalidad, etc.
No digo que problemas como la preservación del medio ambiente no sean importantes, pero hay razones perversas y crueles detrás de todo eso.
Ahora todo eso me tiene sin cuidado, lo que tiene que suceder, sucederá. Porque hay alguien que lo permite y que está en control de TODO, y es Cristo. Así que puedo descansar tranquilamente en su Verdad.