Del editor asociado
Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús, para mostrar en los siglos venideros las abundantes riquezas de su gracia en su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.” —Efesios 2:4-7
Cuan inexplicable puede ser para nosotros como humanos entender el valor y profundidad del sacrificio de nuestro Señor Jesucristo. Un acto sobrenatural que, sin merecerlo, sin haber hecho absolutamente nada para poder disfrutarlo, Dios que es rico en misericordia lo tenía preparado para aquellos que fuimos predestinados para salvación, desde la creación del mundo.
Cuanto agradecimiento, pero también cuanta responsabilidad debe de existir en aquellos que hemos sido receptores de su rica e inagotable misericordia, la cual nos regeneró y nos hizo coheredeos juntamente con Cristo.
En Evangelio Verdadero, tenemos el compromiso de equipar y proveer materiales bíblicos para el crecimiento espiritual del creyente. Este compromiso es una respuesta a tan maravilloso regalo, con la intención de que crezcamos en el entendimiento y apreciación del evangelio para poder ser portadores fieles del mismo.
Que las palabras de Charles Spurgeon “cuando eres salvo, debes buscar ser como tu Salvador” resuenen hoy en día en nuestros corazones, creciendo constantemente en nuestra apreciación a tan maravilloso regalo y proclamar el evangelio fielmente a otros. Es nuestro deber hacerlo.
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